Fotos Canto Cochino - Yelmo Vértice geodésico.


Tras cruzar el rio nos encontramos con el GR10, la autopista de la pedriza	Pronto llegamos al Tolmo, encontrando a nuestra derecha la Maza.	Seguimos marcha hacia el collado de la Dehesilla.

Donde siempre suele haber gente fotografiándose junto al minitolmo.	Mirando hacia atrás podemos ver la Maliciosa.	Seguimos camino entrando en la zona más pedregosa del camino.

La misma foto anterior en la que un voluntario posa para mostrar las dimensiones reales.	Como puede verse estamos siguiendo las marcas blanca-amarilla.	Si bien el camino parece que se esconde entre las piedras.

Y en cuanto pasamos parece que era evidente que ese era el mejor camino.	Tras esa pequeña rampa llegamos rápidamente a un alto	Donde tenemos un trecho cómodo en el que casi vamos llaneando, incluso hacia abajo.

Pasamos junto a esta curiosa forma, me refiero a las piedras, claro.	Y rápidamente divisamos el Yelmo junto con su vértice geodésico.	Lo rodeamos en dirección a la chimenea que nos permitirá subir arriba.

En esta aproximación en la zona de sombra podemos ver la famosa grieta.	Aqui vemos a dos simpáticos senderistas que comienzan el ascenso.	Pasada la primera dificultad mejoran los ánimos

Llegados a la mitad del recorrido, hacia atrás vemos esto.	Y esto otro es lo que nos queda, hay que pasar por debajo de la piedra.	Y aunque parezca que no, si que se pasa, si.

Arriba del todo encontramos el vértice geodésico.	Y la fecha en la que colocaron alli el Yelmo.	Desde lo alto le echamos un vistazo al camino de vuelta, el Hueco de las Hoces.

Y nuevamente a la grieta después de esperar un ratito a que quede libre.	ya que como es el único sitio de acceso siempre hay gente esperando.	Bordeamos el Yelmo y nos encaminamos hacia el Hueco de las Hoces.

Y la verdad es que desde lo alto del Yelmo.....	......las piedras se veian más pequeñas.....	mucho más pequeñas.....

Desde aqui echamos otro vistazo al Yelmo y	y seguimos buscando el mejor camino entre piedras.	Por fin después de un sinfin de piedras y caminos cortados casi tocamos el aparcamiento

Por suerte el último trecho del camino nos permite un avance más cómodo.